Get help and support
Cuida de ti mismo
Cuando alguien cercano a ti tiene problemas con los juegos de azar, puede desestabilizar tu vida.
Los familiares y amigos de personas con problemas de juego pueden experimentar:
- problemas de salud, incluyendo dolores de cabeza,
dolores de espalda, hipertensión, asma, palpitaciones y migrañas
- sensaciones de ansiedad y depresión
- cambios en los hábitos alimenticios y de sueño debido
al estrés
- incremento en los hábitos de fumar y exceso en el
consumo de alcohol
- preocupaciones financieras
- sentimientos de traición y pérdida del respeto por la
persona con problemas de juego
- violencia intrafamiliar.
Cómo mantenerse sano y manejar el estrés
Seguir rutinas normales y cuidar de ti mismo es igual de importante que ayudar a la persona con problemas de juego. Mantén tus amistades, continúa con tus intereses y pasatiempos, y haz las cosas que más te gustan.
Sigue estas recomendaciones para mantenerte sano y manejar el estrés:
- come de manera regular y balanceada
- intenta convertir las comidas en momentos familiares o
sociales
- haz ejercicio regularmente, intenta practicar yoga o
sal a caminar frecuentemente
- establece horarios para ir a dormir y para despertar
- evita las drogas y el alcohol (pueden hacer las cosas
peor)
- toma tiempo para tus necesidades espirituales o
religiosas
- comparte tus preocupaciones con tus amigos y
familiares en los cuales confíes
- consigue apoyo profesional para ti y alienta a la persona con problemas de juegos a conseguir apoyo.
Obtén más información sobre:
Cómo mantener y recuperar las relaciones
Los problemas con los juegos de azar pueden poner una presión terrible en las relaciones. Cuando una persona pasa menos tiempo contigo o no cumple con sus compromisos, puede dar la impresión de que no le interesa.
Puedes experimentar una mezcla de sentimientos. Por ejemplo, te puedes enojar por las deudas que han acumulado y tener miedo de que no pararán de jugar juegos de azar, y aun así quieres ayudarlos.
Es importante reconstruir la confianza, pero recuerda que toma tiempo. Para eso tú puedes:
- buscar maneras de seguir confiando en la persona
- alentar a la persona para que sea honesto/a con sus
ganas de jugar juegos de azar, aceptar lo que te dice y premiar la honestidad
- conversar una vez a la semana, de manera abierta sobre
heridas del pasado o preocupaciones sobre el futuro
- tomar tiempo para divertirse juntos, sin hablar sobre
los problemas de juego
- considerar visitar un asesor juntos.
Si estás perdiendo la esperanza, es importante que busques ayuda profesional.